La Junta de Andalucía y el Colegio de Administradores de Fincas de Málaga y Melilla han mantenido recientemente una reunión para que la corporación colegial colabore activamente en la concienciación a comunidades de propietarios y vecinos para que se haga un uso responsable del agua, ante la situación de extrema sequía que está padeciendo la provincia de Málaga.
Por parte del CAF Málaga participó el presidente del Colegio de Administradores de Fincas de Málaga y Melilla, Manuel Jiménez, el vicepresidente, Manuel Díaz, y el gerente, Álvaro López, mientras que en representación de la Junta de Andalucía asistió la delegada del Gobierno andaluz en Málaga, Patricia Navarro, y el delegado territorial de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Fernando Fernández. En la reunión, la administración autonómica explicó con detalles las medidas que se han puesto en marcha desde 2019 contra la sequía, entre las que destacan los cambios legislativos para impulsar la construcción de infraestructuras hidráulicas.
Al término del encuentro la delegada explicaba que la “máxima responsabilidad de los administradores de fincas a la hora de trasladar y gestionar las comunidades de vecinos en una situación tan complicada”, ante la situación de emergencia en los sistemas de explotación de agua de Axarquía, Málaga capital y Costa del Sol.
Desde el Colegio de Administradores de Fincas de Málaga y Melilla se han puesto a disposición de la Junta de Andalucía y del resto de administraciones públicas para colaborar en todo lo que esté en su mano, incluido ayudar a concienciar a los vecinos sobre la importancia de hacer un uso responsable del agua.
Asimismo, el Colegio ha solicitado que los ayuntamientos y organismos responsables aporten “claridad en las limitaciones que se adopten en torno a la apertura de las piscinas de las comunidades de propietarios, a fin de evitar situaciones de conflictividad vecinal” y ha señalado la incompatibilidad de las ordenanzas y bandos municipales con la actual regulación sanitaria que obliga, entre otras cuestiones, a mantener operativas las duchas y los servicios en las piscinas.
La aprobación reciente del cuarto decreto de sequía por parte del Gobierno andaluz dotará a la provincia de Málaga de 52 hectómetros cúbicos agua extra y permitirá aliviar los efectos de una sequía pertinaz contra la que la Junta de Andalucía viene trabajando desde 2019 con una inversión global de 1.500 millones de euros; más de 304 millones en la provincia de Málaga.
